Tengo una formación técnica en ingeniería, matemáticas, física, química, óptica, mecánica, informática, etc. Por tal motivo me valgo de lo que conozco para usar como analogías representativas de procesos energéticos intangibles, y muy, pero muy difíciles de explicar desde un punto de vista tridimensional. Uso para eso las herramientas que tengo a mi alcance y que mejor manejo, que son las ciencias. Estos procesos son multidimensionales y lo más que nos podemos acercar a su comprensión, con mucho esfuerzo, es a una visión pentadimensional de los mismos, y de igual forma, la comprensión obtenida va a ser incompleta y errónea, pero más cercana a la realidad que si lo hacemos desde la limitada observación 3D. Sé que a algunos les resultará más difícil que a otros entender de esta forma las analogías, pero es lo que tengo para dar, ni más, ni menos. Lamento no poder o tener un método más amplio y general de transmisión de información, pero como decía un gran capo cómico ya fallecido, el genial Alberto Olmedo, “es lo que hay”.

Leí un comentario de un querido y antiguo lector, que decía que se está equivocando el camino a seguir, que se está buscando la verdad a través del conocimiento, que la información y la intelectualización del conocimiento no conduce a la verdad, y estoy completamente de acuerdo con la idea por él expuesta, pero humildemente les digo a aquellos que pudieran pensar y sentir así, que nunca fue mi propósito e intención transmitir conocimiento, ni siquiera información como parece y habitualmente digo, sino mover energías dentro y fuera de ustedes, que los lleven a vislumbrar SU verdad,SU camino, SU cinta de Moebius particular, y no la mía. Si la impresión fue diferente, disculpen mi falta de capacidad para transmitirlo.

Durante años busqué mi verdad en verdades ajenas, Cristo, Buda, Mahoma, Brahma, por aquí por allá y por más allá. Me calzaba los zapatos de otros para ver cual me iba mejor, pero después de caminar un rato me dolían los pies, así que los dejaba y seguía buscando. Contemplación, meditación, oración y todos los “ción”. Gurdjieff, Blavatsky, Zoroastro, y todos los astros, absorbiendo verdades ajenas como si fuera Bob esponja en una pecera, hasta que llegué al punto que conté en la cinta de Moebius. Hay algunos que le quedan los zapatos ajenos de maravilla, y creo que tienen que usarlos sin temor, pero otros sólo les quedan los propios, los hechos por el artesano sabio de su interior, y esos no se comparten. Yo uso mis propios zapatos, y no los comparto, porque son exclusivamente míos, pero intento enseñar como se construyen, intento transmitir el antiguo oficio de artesano, para que otros puedan caminar con sus propios zapatos, y para eso, tengo que darle las herramientas, el cuero, la técnica del moldeado y de corte, la costura, el teñido e infinidad de cosas que parecen intelectuales pero no lo son, son la magia del espíritu del artesano, el conocimiento de cómo se trabajan los materiales y se utilizan las herramientas para poder, al final, construirse sus propios zapatos mediante la alquimia de la transmutación. Pasemos pues a la mecánica sagrada de la artesanía del calzado, que los preparará para la magia de sus vidas, permitiéndole transmutar un simple y duro cuero, en unos suaves y hermosos zapatos.

En el artículo anterior dije: “Una de las características de la cinta de Moebius, es que si recorre un borde termina recorriendo también el borde opuesto, igual pasa con sus caras internas y externas. Si toma la cinta y la divide en dos, cortando por la mitad de la banda a lo largo, esta cinta no se separa como se espera que suceda, sino que se transforma en otra cinta del doble de tamaño que la primera, pero con la misma superficie. Su ancho (cara) disminuye, pero su longitud (largo) se extiende equilibrando su superficie (plano), logrando que su forma (realidad) cambie y se extienda. El problema es que sus propiedades también cambian y sólo podrá recorrer un solo plano o cara de su superficie, pero seguirá pudiendo recorrer ambos lados de su contorno. Si al contrario corta la cinta de Moebius a lo largo, esta vez por un tercio de la anchura de la banda, obtenemos dos cintas entrelazadas, una del doble de la longitud que la primera, con las propiedades cambiadas como en el primer caso, y la otra de la misma longitud y propiedades que la original.” Si llevan a la práctica lo por mi dicho, comprobarán que algunas cosas concuerdan y otras no, igual pasará con la explicación y analogía de la triada energética (físico-mental-etérico). Esto sucede por dos causas:

1º) Por la observación de los componentes del proceso por separado, sin antes conocer la totalidad del resultado final.

2º) Por analizar un proceso objetivo multidimensional desde un punto de observación subjetivo tridimensional.

Me explico, si bien el uso de analogías es necesario para transmitir una idea, no es la mejor forma para hacerlo, la mejor forma es a través de los símbolos, el lenguaje más antiguo que existe, pero para comprender todo lo que transmite un símbolo, primero tendríamos que ser un iniciado en las artes de la magia, y para ello es necesario las analogías. O sea que estamos en la paradoja del huevo y la gallina. Por consiguiente, la forma de comprender una analogía, no es mediante el centro intelectual, sino mediante el centro instintivo. El intelectual, emocional, espiritual y motor, tienen que quedar inactivos durante el proceso. La característica del centro instintivo, es que puede “intelectualizar” la información de forma natural, sin preconceptos e ideas que la desvirtúen y “emocionarse y sentir” sin que las asociaciones personales intervengan. Ustedes sentirán que es así, les resonará en su interior, aunque no comprendan el proceso ni la información, pero en lo más profundo de su Ser, se activará el recuerdo de lo aprendido en la fuente y comprenderán perfectamente, como si en un sueño se tratara, toda la magia de la transmutación y las energías de las palabras.

Cuando armamos una cinta de Moebius, lo que hacemos a nivel físico, es girar 180º un extremo de la cinta, logrando de esta forma que el borde izquierdo se junte con el derecho y el derecho se junte con el izquierdo, en otras palabras, estamos polarizando (cambiando de polo) sus límites (bordes). Cuando esto sucede, sus planos giran en el punto (x) de unión, también 180º dando la ilusión de continuidad tanto de las caras como de sus contornos. En realidad, tanto el plano como el límite, terminan en esa línea de unión, y comienza el otro plano o límite de la cinta, o sea son continuos (uno seguido del otro, extendiéndose sin interrupción) por ilusión y contiguos (inmediatos pero diferentes) por realidad. Al cortar la cinta por la mitad y llegar al punto de unión, lo que sucede es que la cinta al ser divida, vuelve a girar 180º, quedando en su posición original pero retorcida, perdiendo las características de Moebius y adquiriendo otras que no son tampoco las de un cilindro, sino las de un tórque (esfuerzo de torsión) donde las propiedades, en este caso quedan modificadas. Dos cintas de Moebius abiertas y unidas en los extremos. El plano (A) contiguo al (B`) y el (A`) contiguo al (B). Igual sucede con el límite izquierdo y derecho de los mismos. Por ese motivo se puede recorrer el nuevo plano (AB`) por un lado, y el (A`B) por otro, y el límite (izquierdo-derecho`) por un lado y el (derecho-izquierdo`) por otro. También sucede en el corte a 1/3 de la cinta y su analogía la triada (físico-mental-etérico) Transcribiré a continuación, parte de un correo a un amigo en el cual le explicaba esto de lo que estoy hablando:

“Por ejemplo, no tiene que ver como se unen los planos originales, sino como queda en la alquimia final. Al cortar por 1/3 de la cinta, las que quedan unidas son los 2/3 externos, y el central queda siempre aparte, manteniendo las propiedades originales, o sea que según como ubiquemos el (do) de la triada energética (el secreto de las octavas III) en este caso (físico-mental-etérico), quedará (físico-etérico)-(mental), (físico-mental)-(etérico) o (mental-etérico)-(físico) según donde inicie la triada (do) y la dirección del giro (+ o -) positivo o negativo sobre la octava. Su contorno en cambio será continuo siempre en el universo que quede separado, mientras que en el otro será continuo por unión de planos y separado por alquimia final, (exterior-exterior) de los componentes de la triada de los extremos, e (interior-interior) del corte de los componentes a 1/3 de la cinta.

Resumiendo, el nuevo “universo compuesto”, constará de dos componentes representados por las caras o planos de la cinta, independientemente de la unión por “continuidad de planos” de antes de la alquimia, y sus contornos serán continuos y contiguos por unión de planos y separados y contiguos por alquimia final.”

Esto lo desarrollaré en profundidad en próximos artículos. Lo importante en este momento es saber que siempre para estudiar un proceso energético, hay que tener en cuenta la alquimia del proceso y el resultado final como conjunto, nunca analizar los componentes por separado sin antes tener la visión general completamente clara, porque se llegará a conclusiones erróneas, no porque realmente lo sean, sino porque la observación será del resultado 3D y no 5D como debe ser al estudiar energías o movimientos energéticos. Más allá de 5D, es imposible comprender desde nuestra perspectiva 3D procesos multidimensionales, así que, aunque nuestra conclusión final en 4D de procesos 5D también sea errónea, se acercará más a la realidad general del resultado final, que si lo observamos limitadamente desde nuestra perspectiva 3D.

¿Cuál es la mecánica sagrada de todo esto? La que usted puede intuir después de haber aprendido a construir sus propios zapatos, porque conocerá los secretos del artesano para transmutar las energías del cuero, y sacar el calzado que yace oculto en su interior, mediante la magia de la transmutación de las energías.