Fin del ejercicio iniciado el 4 De Julio De 2019 y finalizado el 8 De Julio De 2019. Saquen sus propias conclusiones. Mi trabajo termina cuando el suyo comienza. Nada es lo que parece.
Un día el Amasterdamo ABC Adamo reunió a todos los “iniciados” para comunicarles que implementaría un sistema de “estrellas”. Otorgaría una estrella cuando lo estimara y a quién considerada merecedor de esa estrella. Dijo que cuando algún iniciado acumulara cinco estrellas sería premiado con lo que se merecía. Todos comenzaron a esmerarse para conseguir una estrella, a tal punto fue el esmero que llegó a convertirse en una competencia donde el objetivo final ahora era conseguir ser el mejor alumno del ABC Adamo.
Adamo entregaba estrellas a diestra y siniestra, pues uno era mejor que otro en cuestiones de agradar al G.M.º. y Adamo ponía su mayor empeño en confrontar y enfrentar a unos con otros. Cuando alguien conseguía las cinco estrellas siempre había un festejo donde la envidia era la anfitriona. Luego de un tiempo, el Amasterdamo reunió a todos los iniciados que habían conseguido las cinco estrellas y les dijo: “Felicitaciones!! Consiguieron lo que se merecen y serán transferidos a otra clase” Todos aplaudieron, el ABC sonreía en silencio.
Les dijo que la semana próxima fueran a la casa de Don José y se presentaran ante el Maestro “Metag” (Rubén). Así lo hicieron, y a la semana siguiente llegaron felices con sus cinco estrellas de promoción a la casa de José. Ingresaron a la reunión donde Metag los recibió con una sonrisa. Dentro había un grupo de personas que jamás habían visto. Pensaron que eran los que fueron promovidos antes que ellos y se sentaron sonrientes en el gran salón. Pasado un rato donde comentaban entre ellos el gran triunfo obtenido, entró Metag y comenzó a presentarles a los demás miembros del grupo y pidió un aplauso de bienvenida para los nuevos integrantes diciendo que por su esmero habían conseguido un lugar de privilegio. Cuando hubo terminado el recibimiento y presentación dijo: “Ahora demos comienzo a la reunión de neófitos” y la clase inicial comenzó.
¿Cuál es la moraleja? Nada es lo que parece. Escucha lo que el Maestro calla y no solo lo que dice, pues en su silencio está su intención inicial y propósito final. No me crean, no crean nada de lo que digo, investiguen y créanse a ustedes mismos. Mañana comenzamos las clases. Bienvenidos a DDLA.